Cómo mantener la nevera limpia y organizada: 10 sencillos consejos

Mantener el frigorífico limpio y organizado puede parecer desalentador, pero no tiene por qué serlo. Con estos 10 sencillos consejos, podrás mantener tu frigorífico en el mejor estado posible. No sólo tendrá un aspecto limpio y ordenado, sino que además mantendrá los alimentos frescos durante más tiempo. Siguiendo estos pasos, puedes asegurarte de que tu frigorífico sea un lugar agradable y ordenado para almacenar tus alimentos. Desde la limpieza de los estantes hasta la organización de los alimentos, estos 10 consejos harán que su frigorífico parezca nuevo.

Limpieza de estanterías: qué usar, cómo hacerlo

Si tiene estantes de cristal, utilice un limpiacristales normal. Para las estanterías de plástico, utiliza una solución de vinagre y agua. Si hay partículas de comida adheridas a las baldas, puede utilizar una esponja con un detergente suave o agua tibia y un poco de detergente para vajillas. Limpia las baldas con cada limpieza. Asegúrate de limpiar cualquier resto de comida que pueda caer al suelo del frigorífico. Esto ayudará a mantener el frigorífico limpio y el suelo libre de bacterias. Si tiene estantes cromados, utilice un limpiador para cromo. No te olvides de los bordes de las baldas. Este es uno de los lugares más olvidados del frigorífico. Es un lugar perfecto para la acumulación de bacterias. Asegúrate de limpiar bien las baldas, incluidos los bordes.

Organiza tus alimentos: utiliza recipientes, etiqueta los alimentos, separa los alimentos crudos de los cocinados.

Los alimentos durarán más si están bien organizados en tu frigorífico. Si tienes espacio, guarda los alimentos en recipientes de cristal para mantenerlos frescos. Si no tienes espacio para recipientes de cristal, puedes utilizar recipientes de plástico o bolsas de plástico aptas para alimentos. La temperatura del interior del frigorífico debe oscilar entre 0 y 4 grados Celsius. Si mantienes el frigorífico a una temperatura más alta, corres el riesgo de dañar o estropear los alimentos. Guarda los huevos en la puerta del frigorífico, porque es la parte más caliente. La leche y el queso deben guardarse en el compartimento principal del frigorífico. La carne y el pescado deben guardarse en la parte más fría del frigorífico, que suele ser la parte trasera o el estante inferior. Mantenga los alimentos perecederos separados de los no perecederos. Así evitarás que los alimentos frescos se contaminen con los que no lo son. Mantenga la carne y el pescado crudos alejados de los alimentos cocinados, como las verduras, que podrían contaminarse. Así reducirás el riesgo de contraer enfermedades transmitidas por los alimentos.

Limpiar las juntas de las puertas: cómo hacerlo, qué utilizar

Rocía las juntas con una solución suave de agua y jabón y frótalas con una esponja suave. Utiliza un cepillo de dientes para limpiar las grietas de difícil acceso. Asegúrate de limpiar el interior y el exterior de la puerta. En caso de que las juntas están sucias, es posible que los olores se cuelen en el frigorífico. Si no puedes limpiar las juntas con agua y jabón, puedes utilizar una solución de lejía suave, pero asegúrate de aclararla bien. Puedes limpiar las juntas de todo tipo de frigoríficos con una mezcla de bicarbonato sódico y agua. También puedes utilizar una mezcla de agua y vinagre.

Limpiar los cajones: qué usar, cómo hacerlo

Rocía los cajones con agua y jabón, y frota con una esponja suave. Si hay grietas de difícil acceso, puedes utilizar un cepillo de dientes. Asegúrate de limpiar también la parte inferior de los cajones. Aquí es donde los olores tienden a acumularse y son difíciles de limpiar.

Elimine todos los alimentos viejos: compruebe las fechas de caducidad y deséchelos correctamente.

Retire todos los alimentos caducados de su frigorífico. Comprueba las fechas de caducidad de los alimentos para asegurarte de que sabes cuándo caducan. Una vez que hayas eliminado los alimentos viejos, limpia la nevera. Es probable que se haya acumulado suciedad en el fondo del frigorífico. Utiliza un aspirador para limpiar el fondo del frigorífico. Asegúrate de limpiar la zona donde se encuentran las bobinas. Si no limpias esta zona periódicamente, puede que notes que tu frigorífico ya no enfría tanto como antes.

Mover baldas y cajones: cómo hacerlo, qué utilizar

Hay algunas formas sencillas de reorganizar tu frigorífico. Puedes mover baldas y cajones para adaptarlos mejor a tu forma de almacenar los alimentos. Si guardas todo en el lugar equivocado, será más difícil encontrar lo que buscas y tu comida no durará tanto. También puedes utilizar organizadores de silicona para cajones para mantener tu frigorífico ordenado y bien organizado. Se pueden utilizar en cualquier cajón.

Limpiar paredes y suelos: qué usar, cómo hacerlo

Limpia las paredes y el suelo de tu frigorífico con agua y jabón, o con una mezcla de agua y vinagre. También puedes utilizar bicarbonato sódico y agua para limpiar las paredes y el suelo. Asegúrate de limpiar el suelo con una esponja. No utilices un cepillo, ya que rayaría el suelo del frigorífico, que está hecho de un material poroso. Si tu frigorífico tiene un dispensador en la puerta, limpia también el interior del dispensador. Utiliza un cepillo de dientes para limpiar la suciedad. Si mantienes limpio el frigorífico, evitarás que huela mal. Pero si esos olores empiezan a aparecer, hay algunas cosas que puedes hacer para deshacerte de ellos.

Limpiar el interior: qué usar, cómo hacerlo

Puedes limpiar el interior del frigorífico con una mezcla de agua y vinagre, o con una solución suave de agua y jabón. También puedes utilizar bicarbonato sódico y agua. Si tu frigorífico es de acero inoxidable, evita utilizar productos químicos agresivos, ya que podrían decolorar el interior. Si tu frigorífico es de plástico duro, puedes limpiarlo con agua y vinagre. También puedes usar una mezcla de agua y bicarbonato.

Reposicionar baldas y cajones: cómo hacerlo, qué usar

Si quieres cambiar la forma de guardar algo en tu frigorífico, pero no puedes mover los estantes o cajones, puedes utilizar imanes para mantener los objetos en su sitio. Por ejemplo, puedes utilizar imanes para mantener las bolsas cerradas o para sujetar un recipiente al cajón de la nevera. También puedes utilizar imanes para colgar hierbas y especias.

Mantenlo limpio y organizado: consejos para un mantenimiento regular

Limpia la nevera cada tres meses. Revisa la nevera a menudo y tira los alimentos caducados. Vigila si hay acumulaciones o derrames. Si ves algo, límpialo inmediatamente. Así mantendrás el frigorífico limpio y los alimentos frescos durante más tiempo. Si mantienes el frigorífico limpio y ordenado, te resultará más fácil encontrar lo que buscas. También reducirás el riesgo de contraer enfermedades transmitidas por los alimentos.

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